Inicio
este blog, con la intención de inmortalizar de alguna manera todos los viajes
que he echo o haré en un futuro. Algunos me será imposible describirlos, porque
ha pasado tanto tiempo desde que los hice que muchos recuerdos ya se han
olvidado. Como Amsterdam, Cerdeña, la costa azul entre otros. Pero desde que
volví de Japón, me auto-impuse relatar por escrito todas mis experiencias y
aventuras para, algún dia, volver a reelerlas y revivir esas experiéncias y
emociones que un día tuve muy presente. Y aunque los recuerdos acumulados en
aquellos días quedarán grabados en mi mente para siempre, de esta manera
evitaré olvidar algunos pequeños detalles que con el tiempo se vuelven
borrosos, al igual que los sueños, y es que realmente, todos mis viajes han
sido un sueño. Algo que parecía tan lejano y que un dia se volvió real.
Viajar
me apasiona. Nada en el mundo me hace sentir mejor. Llamadme loco, pero para mi
es casi una obsesión... Nada me gustaría más que poder dedicar mi vida a
recorrer el mundo de principio a fin y abandonarme a esa sensación de libertad
y emoción que te invade cuando emprendes un nuevo viaje. Supongo que a muchos
sabréis de lo que hablo...
Mi
mente siempre vuela en busca de nuevos destinos que conocer, nuevos paraísos
que descubrir. Y tal vez os preguntaréis, ¿qué es el paraíso? Os diré que, para
mí, más que un lugar es una sensación, un sentimiento de que estás en un sitio
mágico, especial... Da igual que sea en una montaña, como una playa, una
ciudad, un desierto o un restaurante de cualquier rincón, me refiero a ese
momento en que te detienes a admirar lo que te rodea. Esa emoción extraña que
te inunda el pecho, suspiras y exclamas: ¡Esto es el paraíso! Así que nada, de
momento puedo aseguraros que he encontrado varias veces mi pequeño paraíso, y
aunque ahora queda solo la nostálgia de que haya pasado, espero a lo largo de
mi vida poder seguir viajando... En busca de nuevos paraísos.
¿Quién soy ?
Me llamo Juan, pero mis amigos me llaman fofi ( de ahí lo de Fofi Jones ). Tengo 25 años, soy independiente, solitario y amante de los animales. Me considero una persona valiente a la que le gusta tomar decisiones y no dejar que las decisiones le tomen a él.
Viajar
es mi pasión, mi forma de pensar, y no hay mañana que me levante y piense;
¿Cual será mi próximo destino? Una vez alguien me dijo que viajar era como una
droga, adictivo, que una vez empiezas, no puedes parar. ¡Que gran razón!
Los
primeros contactos con el extranjero los tuve en la escuela. Poco más que
escapadas "lúdicas" donde apenas veías nada, ya que decir de aprender
algo. Pero para un viajero soñador como yo, ya me impregnó ese gusanillo a
descubrir lo desconocido. Una vez me puse a trabajar y ganar algo de dinero, ya
es cuando realmente empecé a viajar. Más de 15 países han sentido mis pies
desde entonces, y no veo el final de parar con mi adicción. En cada viaje, me
gusta dividirlo un poco en varias temáticas para poder hacerme con una idea
general de lo que visito; Naturaleza, cultura, gastronomía y por supuesto,
diversión.
Algunos
viajes los haré en solitario, otros me acompañarán diferentes amigos, pero sea
como sea, todos tendran constáncia en este blog. Para todos aquellos que
quieran apuntarse a mis futuras aventuras, tengo que decirles que yo me baso en
tres reglas fundamentales:
1. ABRE TU MENTE, libérate de todo lo que conoces en tu lugar de origen. Despójate de prejuicios y prepárate para absorber todo lo que veas, escuches, huelas, sientas en este nuevo país al que has llegado lleno de sorpresas y de cosas distintas a las que jamás hubieras llegado a imaginar. Tal vez sea necesario que le dediques algo de tiempo a esta preparación mental. Antes de viajar no sólo es importante preparar la mochila, la documentación o el dinero. También es importante prepararse a sí mismo, dedicar unos minutos a ser consciente de lo que estás haciendo. Estás viajando a un lugar al que no sabes si jamás tendrás la oportunidad de regresar, por lo tanto merece la pena abrir todos los sentidos y empaparse de las distintas formas de hacer y de vivir con las que te encontrarás. Ese será tu auténtico souvenir.
2.
APRENDE,
pregunta, conversa, explica, interésate por cómo viven, que tradiciones tienen,
cuál es su religión, que deportes practican, que tipo de gobierno tienen, cuál
es su gastronomía, su história. Habla con los habitantes del lugar que visitas.
Interésate por ellos. No hay mejor forma de conocer un país, una cultura, una
religión, que a través de los ojos y de las experiencias de quienes lo habitan.
A ellos les encantará, y también se interesarán por tí. Te darás cuenta de que
todas las personas somos iguales, independientemente de nuestra lengua, nuestra
raza, nuestras tradiciones. Todos buscamos lo mismo, ser felices a nuestra
manera, y la mejor forma de comprobarlo es mezclándote y relacionándote con los
habitantes del lugar al que viajas.
3.
DISFRUTA, somos
unos afortunados por poder viajar. Sé consciente de ello y disfruta de cada
momento de tu viaje. Olores que no olvidarás jamás. Imágenes que permanecerán
para siempre en tu retina. Personas que te harán descubrir nuevas formas de
plantearte la vida...
Y por
último y no menos importante, ¡Sal de juerga! No te obsesiones con dedicar todo
tu tiempo a museos, monumentos, lugares emblemáticos... Sal por la noche, ves a
los bares, prueba los licores locales, degusta cervezas. Deja que la noche te
muestre cómo late el corazón del lugar que estás visitando.